martes, 26 de agosto de 2008

El diario ruso Pravda pide penas de muerte para el gobierno USA por el 11-S

El pasado 22 de agosto el diario Pravda publicó en una columna de opinión un artículo en el que el norteamericano Gregory F. Fegel acusa al gobierno de los Estados Unidos de estar, entre otros, detrás de los atentados del 11-M, del 7-J, y por supuesto, del 11-S. Asimismo, dice que la destitución no sería suficiente y pide la pena de muerte para todos los altos mandos implicados.

La destitución no es suficiente
22.08.2008 - Pravda.Ru
Original en inglés

En español (extraído de trinityatierra.wordpress.com)

Hay Indicios de que todos los funcionarios del Gobierno de los USA y sus aliados planearon y llevaron acabo los ataques del 11/S

Pruebas irrefutables muestran que los más altos funcionarios de la Administración Bush en conspiración con muchos otros funcionarios del Pentágono, la CIA, el FBI, el FEMA, NSA, el NORAD, funcionarios de la ciudad de Nueva York, controladores de tráfico aéreo, ejecutivos de líneas aéreas, expertos de demolición controlada, técnicos de gráfica por ordenador, ejecutivos de los medios de comunicación y otros juntos planearon y cometieron los horribles ataques del 9/11/2001 contra el Pentágono y las Torres Gemelas del Centro World Trade en la ciudad de Nueva York. Los ataques del 9/11 se cargaron a la cuenta de unos supuestos “secuestradores árabes”, media docena de personas que, según se ha confirmado, siguen vivas y por lo tanto son inocentes de estos crímenes.

Los ataques bajo la falsa bandera del 9/11 proveyeron de una excusa para la “Guerra contra el Terrorismo” llevada a cabo por el Gobierno de los USA, cuyo propósito principal fue ganar el control para los Estados Unidos de los lucrativos campos de petróleo de Oriente Medio. Un segundo propósito fue elevar los impuestos a los ciudadanos de los Estados Unidos para aumentar gastos de defensa en apoyo del enorme complejo militar/industrial de USA y un tercer propósito fue establecer una justificación de la puesta en marca de medidas de un estado policial dentro de los Estados Unidos bajo el paraguas políticamente ambiguo de la ”Seguridad Nacional”. Cuando los derechos de libertad de expresión y reunión sean recortados a los ciudadanos de los USA, el gobierno de los Estados Unidos será capaz de establecer su agenda de dominación mundial sin la distracción doméstica de opiniones disidentes, protestas o manifestaciones.

El Pentágono, la CIA y FBI y otras agencias y funcionarios del gobierno de USA han perpetrado muchos crímenes, y las bombas falsas y ataques contra los ciudadanos de los USA y los intereses USA durante los pasados cinco años, además de los asesinatos políticos de John Fitzgerald Kennedy, Robert Fitzgerald Kennedy, y Martin Luther King, la bomba de una discoteca de Berlin en 1988, la bomba del World Trade Center en 1993, la bomba de la ciudad de Oklahoma en 1995, los ataques de cartas con ántrax de octubre en 2001.


El Gobierno de los Estados Unidos y sus aliados tambien son los responsables de las bombas del 2002 y 2005 en Bali, las bombas del tren en Madrid en el 2004, las bombas del 7/7/2005 en Londres y las recientes bombas de Ahmedabad, Jaipur, Bangalore, y de la embajada india en Kabul durante el verano de 2008.

Desde la Segunda Guerra Mundial, ideólogos fanáticos de extrema derecha con conexiones corporativas han ganado gradualmente el control absoluto de las agencias militares de USA, de la inteligencia, el gobierno y los medios de comunicación de masas de USA. El fascismo en USA no es solamente una amenaza real en manos de la administración republicana de G. W. Bush; es una situación completamente establecida desde hace décadas. El fascismo en USA es un tema resulto realmente.

El largo descenso de USA hacia el fascismo no puede ser frenado o eliminado simplemente colocando a un miembro del partido demócrata en la Presidencia o votando a una mayoría demócrata en el Congreso. La infiltración y el control del gobierno de los USA por parte de extremistas de extrema derecha está mucho más avanzada y completa. Ellos manipulan a nuestros funcionarios elegidos como a marionetas y una buena parte de nuestros funcionarios elegidos son parte del establisment fascista. La toma de extrema derecha del gobierno de los USA ha sido un golpe fascista gradual y muy exitoso que no se revertirá sin una lucha a muerte muy seria. Dada la historia de violencia indiscriminada y extrema mostrada por la elite en el poder de los USA, parece bastante obvio que restaurar la democracia de los USA requeriría inevitablemente una Revolución armada violenta en la que los americanos se opongan contra las fuerzas del gobierno de los USA y sus militares.

Como ciudadano de USA y ser humano, personalmente considero que el asesinato de personas inocentes en países extranjeros por parte de la CIA, los militares estadounidense y sus marionetas en apoyo de intereses económicos de las corporaciones multinacionales con sede en USA son totalmente inmorales e intolerables y considero mi solemne deber oponerme a la agresión de USA y al imperialismo de cualquier forma que conozca. El Gobierno de USA y la propaganda de los medios de comunicación promueven un clima en el que las acciones y actividades de las tropas de los Estados Unidos son vistos más allá de cualquier reproche, pero no hay nada de noble ni de heroico en la agresión militar sin causa previa y el genocidio contra la población extranjera inocente y vulnerable.

George W. Bush, George H. Bush, Jeb, Neil, and Marvin Bush, Dick Cheney, Donald Rumsfeld, Condaleezza Rice, Karl Rove, Wolfowitz, Perle, Powell, Armitage, Ashcroft, Abrams, Adelman, Feith, Bolton, Libby, Kissinger, Mueller, Tenet, Goss, Giuliani, Hayden, Chertoff, Baker y muchos otros cientos de indiviuos que trabajan para la Casa Blanca, la CIA, el FBI, el FEMA, el Pentágono, la NSA, el NORAD, la industria de aviación y los medios de comunicación de USA juntos planearon y ejecutaron los ataques del 9/11.

Todos ellos y sus cómplices tienen que ser juzgados por traición y asesinato en masa, y la pena de muerte sería el justo y necesario castigo por haber cometido dichos crímenes.

Necesitamos un juicio al estilo de Nuremberg por Traición y Asesinato en Masa de todos los miembros del gobierno, los militares de USA, las agencias de inteligencia de USA y sus cómplices civiles en la industria de la aviación y los medios de comunicación que participaron en los crímenes asesinos del 9/11. La pena de muerte debería ser aplicada a todos los líderes y sus cómplices, incluso si esto significa ejecutar a cientos o incluso a miles de personas, porque los crímenes de esta magnitud contra los americanos y la República de Estados Unidos no pueden saldarse sin castigo y el castigo debe ser extremo para enviar el mensaje de que los americanos no tolerarán la Traición, ni ahora ni en el futuro. Si se permite que quede sin castigo y en libertad, estos individuos representarán una enorme amenaza para la seguridad y protección de todos los americanos. Si son juzgados de los atroces crímenes del 9/11, la pena de muerte es la única forma de asegurar que ellos y sus aliados no conseguirán atacar América ni a los americanos de nuevo. Las ejecuciones deberían producirse en público y ser televisadas internacionalmente para que el mundo entero sea testigo.

Soy consciente de que existen razones de peso para oponerse a la pena de muerte en muchas situaciones. Sin embargo, también me parece bastante claro que cualquier muestra de clemencia que pudiera mostrarse a los perpetradores de los ataques del 9/11 del gobierno de los Estados Unidos dejaría abierta la posibilidad de que sus simpatizantes pudieran impedir el establecimiento de una democracia en América volcando su violencia hacia los americanos amantes de la paz. Esa es la razón por la que defiendo la pena capital sin consideración alguna de piedad ni clemencia para los asesinos del gobierno de USA que cometieron los ataques del 9/11 y a sus aliados.

Nadie dentro ni fuera del gobierno de USA debería quedar exento de un proceso penal y de la aplicación de la pena capital por los ataques traicioneros del 9/11. A los que planificaron y participaron en los ataques del 9/11 dentro del gobierno de USA y sus cómplices no se les debe permitir protegerse detrás de la cómoda excusa de la “Seguridad Nacional”. La auténtica seguridad y la supervivencia de nuestra república dependen enteramente de esto.

Autor: Gregory F. Fegel

Traducción: Trinity a Tierra

1 comentarios:

Pablo Herrera dijo...

No veas como está Rusia ultimamente, la verda es que es genial que un artículo así salga en un diario tan importante