Mostrando entradas con la etiqueta venezuela. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta venezuela. Mostrar todas las entradas

lunes, 28 de marzo de 2011

Documento revela intenciones bélicas de Estados Unidos contra Venezuela, Libia...


Eva Golinger
28/3/2011

Un documento titulado la “Doctrina de Guerra Irregular de la Armada de Estados Unidos”, publicado en 2009, revela los planes expansionistas de Washington en el mundo. Dentro del documento, fue incluido un mapa que supuestamente define el nuevo “campo de batalla” de Estados Unidos a nivel mundial. El mapa destaca un “arco de la inestabilidad”, dentro de lo cual se encuentran los blancos de esta “batalla”, que incluyen la gran mayoría de países desde Asia Central, el Medio Oriente, el Norte de Africa y Venezuela.

Hay algo que tienen en común estos países: las más grandes reservas estratégicas del mundo. Poco a poco, Estados Unidos ha venido extendiendo su guerra por todos estos territorios, buscando adueñarse de sus ricos recursos.

DOMINAR A LAS POBLACIONES

La Doctrina de Guerra Irregular se oficializa con la llegada al poder del Presidente Barack Obama en 2009. Esta forma de guerra se diferencia de la guerra convencional, que tiene como objetivo derrotar a las fuerzas armadas del adversario y emplea tácticas tradicionales como la invasión con tropas y el bombardeo aéreo. Pero la guerra irregular tiene otro objetivo: dominar e influir sobre las poblaciones civíles, y sus tácticas son distintas. En ésta forma de guerra asimétrica, se utilizan técnicas como la subversión, la penetración y la infiltración en la “sociedad civil”, empleando mecanismos de operaciones psicológicas y promoviendo el caos, la desestabilización y el descontento para generar conflictos internos, debilitando a los pilares del poder.

En el presupuesto del Pentágono del 2010, fue destacado el cambio de doctrina de la guerra clásica a la guerra irregular: “El presupuesto del 2010 apoya al esfuerzo del Pentágono para institucionalizar las capacidades necesarias para conducir la Guerra Irregular…El Pentágono debe desarrollar nuevas capacidades para enfrentar el rango de desafíos irregulares. Para este fin, el presupuesto del 2010 aumenta los recursos para la Guerra Irregular…” (DoD FY 2010 Budget Request Summary Justification).

Simultáneamente, el Pentágono fue expandiendo su presencia militar dentro de su nuevo “campo de batalla”, con la creación del Comando Africa (AFRICOM) y los acuerdos de “cooperación en defensa y seguridad” con Colombia, Panamá, Brasil y Costa Rica. Estos acuerdos, que permitieron ampliar la presencia de equipos, fuerzas y recursos militares de Washington en América Latina, formaron parte de la nueva estrategia de “movilidad aérea”, revelada en el Libro Blanco del Comando Aéreo de la Fuerza Aérea de Estados Unidos.

En dicho documento, Estados Unidos enfatizó la necesidad de ocupar bases militares en Colombia, particularmente en Palanquero, para permitir un alcance aéreo de “amplio espectro” por todo el continente de Suramérica. Según ese documentos y otros de la Fuerza Aérea, esa presencia estadounidense era necesaria para combatir los “gobiernos anti-estadounidenses” en la región: principalmente Venezuela y otros países de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA).

El Libro Blanco también destacó la necesidad de ampliar la presencia militar de Estados Unidos en Colombia, y ahora en Panamá y Centroamérica, para poder asegurar el alcance global, enlazándose con las bases de AFRICOM, y luego por todo el Medio Oriente, Europa y Asia, donde el Pentágono es la fuerza dominante.

AMPLIANDO AL CAMPO DE BATALLA

Con las recientes revueltas en Egipto, Tunéz, Yémen, Bahrein y Libia, Estados Unidos ha venido cumpliendo con sus objetivos- expandiendo su presencia militar y asegurando el control sobre los recursos estratégicos en esa región. Y aunque en todos esos países hubo matanzas por parte de los gobernantes, solo en el caso de Libia, Washington impulsó la invasión militar. En los otros casos, los gobiernos voluntariamente se han subordinado a la agenda estadounidense, pero en Libia, el gobierno de Muammar al-Gaddafi ha resistido.

Desde que Obama llegó al poder, su administración ha ampliado las guerras en Afganistán e Irak, y ha abierto nuevos “campos de batalla” en Pakistán y Yémen, y ahora Libia. Analizando al mapa del “campo de batalla” de la Guerra Irregular, se puede deducir que solo faltará expandir las operaciones militares hacia América Latina; hacia Venezuela en particular, donde residen las más grandes reservas petroleras del mundo.

Las amenazas de Washington contra Venezuela y Cuba se han endurecido durante los últimos meses. Hace pocos días, el Washington Post – periódico influyente sobre la política estadounidense – publicó un artículo promoviendo acciones militares contra Venezuela, acusando al gobierno de Hugo Chávez de ser un “centro de terrorismo mundial”, justo al sur de la frontera de Estados Unidos. En el artículo, pidieron al gobierno de Obama actuar contra Venezuela y clasificarlo como un país “patrocinante del terrorismo”, algo que abriría la puerta a una intervención militar. Al mismo tiempo, el gobierno de Obama ha venido aumentando el financiamiento multimillonario a grupos anti-chavistas dentro de Venezuela, buscando alimentar al conflicto y fomentar alguna acción que podría resultar en un “cambio de régimen”.

Desde el 2001, el plan de invasión a Venezuela fue diseñado. El llamado “Plan Balboa”, ejercicio militar de la OTAN que fue realizado en España en mayo 2001, tenía como objetivo invadir a Venezuela y tomar el control de sus recursos petroleros. De hecho, en el Plan Balboa, la estrategia era invadir y atacar a Venezuela desde las bases militares de Estados Unidos en Colombia, Panamá, Aruba y Curazao, y Puerto Rico, ocupando la zona occidental del país desde Zulia a Apure (la media luna venezolana) y tomando control de la misma. Era un plan secesionista que buscaba dividir a Venezuela en dos partes, dejando el control sobre las reservas petroleras en manos de las fuerzas invasoras.

Ese mapa de invasión fue un simple borrador, sobre lo cual el Pentágono ha venido trabajando e intentando convertir en una realidad. Durante los últimos años, la presencia militar de Estados Unidos en América Latina ha llegado a su nivel más grande de toda la historia, y principalmente está rodeando a Venezuela. El deseo del Pentágono es no tener que activar ningún plan militar contra Venezuela, sino lograr el objetivo de derrocar al gobierno de Hugo Chávez a través de otras estrategias, como el golpe suave (las “revoluciones de colores”), la desestabilización y subversión interna, y una campaña feróz de operaciones psicológicas a nivel mundial que ha satanizado al gobierno venezolano, justificando cualquier agresión en su contra.

El ejemplo de Libia demuestra hasta que punto está dispuesto a llegar el gobierno estadounidense cuando pone en marcha un plan de “cambiar un régimen” que no le conviene, en un país con grandes reservas estratégicas. El campo de batalla de Washington sigue extendiéndose, y Venezuela está claramente en su mira.

viernes, 8 de enero de 2010

¿Y cuando se hará el inventario de los terroristas que radican en EE.UU?


Jean-Guy Allard
Rebelión
8/1/2010

EE.UU., el país que pretende buscar, de manera absurda, terroristas de Al Qaeda en vuelos procedentes de Cuba, es el santuario privilegiado de una importante colonia de terroristas, torturadores, esbirros y mandatarios asesinos que su política sucia hacia Latinoamérica ha generado en el curso de las últimas décadas, confirman los archivos.

Además de haber iniciado, orientado, financiado y manejado el terrorismo contra Cuba a través de sus órganos de inteligencia o de grupos miamenses cuya existencia han fomentado, Estados Unidos ha alentado, apadrinado o inspirado actividades ilegales a lo largo del continente cuyos autores ha luego albergado.

Desde Luis Posada Carriles y Orlando Bosch, autores confesos de la destrucción en vuelo de una aeronave cubana en 1976, con la muerte de 73 personas, hasta los autores de actos de terrorismo contra gobiernos progresistas de la América Latina de hoy, Washington nunca se ha ofendido de ver aparecer en su territorio autores de conspiraciones asesinas o individuos criados o reclutados por sus servicios para sembrar la muerte.

Acerca de Posada, la red Internet está repleta de sus confesiones y de relaciones de sus crímenes que sea como instructor de terroristas en los Everglades, comisario Basilio en Caracas, narcotraficante suministrando armas a la Contra nicaragüense, autor de múltiples planes de magnicidio o promotor de actos de terrorismo en territorio cubano.

De su cómplice Orlando Bosch, un pediatra sicópata, si se ha hablado poco en estos últimos años en una prensa miamense amnésica cuando le conviene, los archivos de los años 60 de esta misma prensa reflejan sin tantos escrúpulos sus “hazañas” sucesivamente como jefe del MIRR terrorista, del “Ejercito cubano anticomunista” o de “Acción Cubana”.

Bosch fue luego jefe, siempre por decisión de la CIA, de la terrorista Coordinadora de Organizaciones Revolucionarias Unidas (CORU), cuyas operaciones fueron entre las más sangrientas de toda la historia del terrorismo en el continente.

El 28 de julio de 1960, Bosch llego a Miami con una visa de 30 días. Cincuenta años después, burlándose de la Justicia venezolana y disfrutando como Posada y muchos otros de la protección activa de la CIA y de los politiqueros mafiosos, cura su senilidad intermitente en un bungalow de Hialeah.

Un listazo interminable de asesinos

La lista de los terroristas cubanoamericanos radicados hoy en EE.UU. que conspiraron y actuaron contra Cuba con las técnicas cínicamente enseñadas en las academias USA del terror y que siguen beneficiándose de la complicidad o de la condescendencia del aparato que hoy busca terroristas preferiblemente árabes, es interminable.

Ya con la caída de la dictadura pronorteamericana de Batista, los asesinos cubanos más repugnantes tales como Esteban Ventura, Rolando Masferrer, Julio Laurent, Pilar García encontraron de inmediato refugio en la Florida donde vivieron lujosamente con el dinero robado al Estado a su salida de la Isla.

De los años de la estación CIA de Miami, la multimillonaria JM/WAVE, surgió el enorme contingente de gánsteres que la agencia recicló, después de Playa Girón, en elementos claves de sus operaciones continentales, tanto con la DISIP venezolana como en las filas de la policía secreta del dictador chileno Augusto Pinochet y en los aparatos de represión de distintos regímenes a quién otorgo un apoyo inconfesable.


Desde los hermanos Novo Sampol, Pedro Crispín Remón Rodriguez y Gaspar “Gasparito” Jiménez, hasta Reinol Rodriguez, Antonio “Tony” Calatayud, Nelsy Ignacio Castro Matos, Roberto Martín Pérez y Sixto Reinaldo Aquit Manrique, Héctor Francisco Alfonso Ruiz alias Héctor Fabián, Sixto Reynaldo Aquit Manrique, Ángel Alfonso Alemán son decenas y decenas de asesinos “anticastristas” que se radicaron permanentemente en Miami y que siguen ahí con estatuto de intocables.

Asesinos pinochetistas y golpistas venezolanos

Sin embargo, la lista de estos terroristas, torturadores, esbirros y mandatarios asesinos hospedados en Miami por EE.UU. es aún mucho más larga.

Se extiende desde torturadores del régimen militar argentino hasta agentes pinochetistas tales como Michael Townley, asesino con los hermanos Novo del chancelier chileno Letelier.

Entre muchos otros militares fascistas salvadoreños, el capitán Alvaro Saravia asesino del arzobispo Romero se ha beneficiado de la hospitalidad estadounidense.

Mercenarios de la Contra nicaragüense y Tonton Macoutes de Haití también aparecen en este inventario que queda por completar e investigar.

Cuando se considera a la Venezuela revolucionaria, aparecen en Miami torturadores como Joaquín Chafardet; auténticos fascistas como Salvador Romaní y Ricardo Koesling; los ex agentes de la DISIP Johan Peña, Pedro Lander, José Antonio Guevara que participaron en el complot para el asesinato del ex fiscal Anderson al lado de Patricia Poleo, también refugiada en la Florida.

Carlos Andrés Pérez, primer responsable de la represión de la sublevación popular venezolana de 1989 conocida como El Caracazo es hoy exiliado en Estados Unidos.

Torturador y asesino de la policía secreta bajo “CAP”, Henry López Sisco está vinculado a una larga sucesión de asesinatos, desapariciones y abusos desencadenados en los años 70 para eliminar a grupos de jóvenes rebeldes.

Orientó las reuniones que tuvieron lugar entre representantes policíacos de Venezuela y el Jefe de la DINA de Pinochet, en agosto de 1975. También vive en EE.UU. como varios de sus semejantes, tales como Hermes Rojas Peralta.

Alfredo Peña, el ex alcalde del Distrito Metropolitano de Caracas quién se hizo responsable de las muertes ocurridas en esta ciudad en abril del 2002 también se esconde en EE,UU.

Los golpistas Carlos Fernández, ex jefe de Fedecámaras, y Daniel Romero, que leyó en público el decreto que suspendía la Asamblea Nacional y las instituciones democráticas, también están en Miami.

“Goni” conspira con los millones robados

El ex mandatario boliviano Gonzalo Sánchez de Lozada (Goni) no solo fue responsable de una represión genocida contra el pueblo sino que se llevo a EE.UU. más de 800 millones de bolivianos (99 millones de dólares) que retiró, al momento de huir del país, de las bóvedas del Banco Central de Bolivia. En el 2003, Sánchez de Lozada ordenó una masacre en la que murieron 67 civiles y quedaron heridos a bala más de 300.

Desde el territorio estadounidense, “Goni” se dedica ahora a financiar movimientos contra el gobierno de Evo Morales.

Por otro lado, Hugo Achá Melgar, identificado como el representante en Bolivia de la Fundación Human Rights (FHR), financiador de la pandilla terrorista desarticulada el día 16 de abril 2009 en Santa Cruz, mientras urdía el asesinato del Presidente Evo Morales, ha también escogido el camino de EE.UU. como varios personeros de misma filiación.

Al difamar a Cuba como procedencia de terroristas cuando se queda de brazos cruzados ante terroristas y promotores confesos del terror presentes en sus propias fronteras, Estados Unidos usa el terrorismo como un instrumento más de propaganda imperial, en contra de una nación que sus propios servicios de inteligencia y de injerencia convirtieron en víctima del terror desde más de 50 años.

(Extraído de www.rebelion.org)

Artículos relacionados:

EE.UU. justifica las medidas contra Cuba porque "patrocina el terrorismo"

Rechaza The Washington Post incluir a Cuba entre países terroristas

jueves, 1 de octubre de 2009

Documentos desclasificados del Pentágono revelan que EEUU apoyó crear un grupo paramilitar en Venezuela


La fuerza habría sido creada en marzo de 2003 por el grupo paramilitar colombiano AUC

Caracas
30/9/2009
Europa Press

Documentos desclasificados del Pentágono y del Comando Sur de EEUU revelan que la Administración estadounidense apoyó la creación de un grupo paramilitar colombiano de ultraderecha denominado Autodefensas Unidas de Venezuela en territorio venezolano, según explicó este miércoles la abogada e investigadora estadounidense-venezolana, Eva Golinger.

"La evidencia muestra justamente esa conclusión, debido al hecho de que es EEUU que ha estado con (el presidente colombiano) Álvaro Uribe, durante los últimos diez años, en Colombia, combatiendo estos grupos irregulares. Sin embargo, han proliferado y han llegado a Venezuela", explicó la abogada en una entrevista al canal Tele Sur.

"Ellos han estado intentando desde hace tiempo empujar el conflicto de Colombia a territorio venezolano para justificar entonces su presencia y sus actividades en Venezuela", aseguró, en alusión a los americanos.

La abogada e investigadora concluye que EEUU tuvo conocimiento de la creación de Autodefensas Unidas de Venezuela "desde el año 2003, casi desde su creación", según se desprende de un informe del Comando Sur de EEUU del 14 de abril de 2003. "Estados Unidos no ha denunciado esto", lamentó, pese a conocer de su existencia poco después de que fueran creadas el 1 de marzo de 2003.

Dicho documento recoge "que las Autodefensas Unidas de Venezuela es un grupo paramilitar que se autodescribe como una milicia bolivariana, creado para radicar los insurgentes y los elementos que andan dentro de la frontera venezolana". "Dicen que las Autodefensas Unidas de Venezuela fueron creados por la (fuerza paramilitar colombiana) Autodefensas Unidas de Colombia", agregó.

"Es obvio que es una organización que fue creado con el fin de esa primera acción que fue el plan de magnicidio que casi lograron ejecutar en el 2004 aquí en Caracas con el descubrimiento de esos cien paramilitares", explicó, en alusión a la detención en 2004 de más de 100 paramilitares colombianos en una finca a las afueras de Caracas y que supuestamente tendrían un plan para asesinar al presidente venezolano.

Infiltración en la frontera

Golinger explicó que estas fuerzas paramilitares, creadas con apoyo de Washington, se han infiltrado "en la zona fronteriza de Táchira y Apure".

"Pueblos como Rubio, por ejemplo, sufren de ese paramilitarismo, hasta el punto de que ya están cobrando vacunas, están imponiendo toques de queda, es como otro país. Los paramilitares están cobrando a toda la comunidad, o sea a los residentes, empresarios para la tranquilidad, pero realmente es la imposición de un estado de terror. Es una manera de reprimir, por que dicen que si no lo paga los van a matar", aseguró.

Golinger reconoció que este problema "lo conoce, lo sabe el Estado venezolano", motivo por el cual el presidente, Hugo Chávez, "mandó a grupos de militares, a grupos de la Fuerza Armada Bolivariana para cuidar justamente esa zona y atacar el tema de paramilitarismo".

La guerra irregular de EEUU

La abogada estadounidense-venezolana reconoció tener "conocimiento que hay más de 3.000 integrantes de grupos irregulares y con un plan para desestabilizar, para neutralizar a los movimientos revolucionarios".

Asimismo, admitió que el apoyo de Washington a fuerzas paramilitares en Venezuela "forma parte de lo que EEUU clasifica como la guerra irregular el uso de grupos militares para promover las acciones violentas para ejecutar también las operaciones especiales".

"Es la militarización de América Latina y el esfuerzo de EEUU de recuperar su influencia en la región bajo la fuerza. (...) El uso paramilitar no es primera vez que se usa, en Cuba también se realizó", explicó.

La abogada e investigadora aseguró que "ha existido la sospecha que los paramilitares están promoviendo un ambiente de desestabilización y, ahora más que nunca, se está confirmando", en referencia a los documentos desclasificados del Pentágono y del Comando Sur de EEUU.

"De eso hay evidencia porque hay documentos de EEUU, del Pentágono, del Comando Sur y su división de inteligencia, que dentro de mis investigaciones se han desclasificado parcialmente, muy parcialmente porque están bastante censurados", concluyó.

(Extraído de www.europapress.es)

Artículos relacionados:

Documentos desclasificados revelan impulso de EEUU a formación de paramilitares en Venezuela (Entrevista a Eva Golinger)

Venezuela está infectada de paramilitares colombianos

Diario estadounidense revela plan de magnicidio contra Chávez que vincula a Manuel Rosales

martes, 23 de septiembre de 2008

¿Quién es Human Rights?


Pedro Mellado
21-09-2008

El director para América Latina de la organización Human Rights Watch, José Miguel Vivanco, y el subdirector, Daniel Wilkinson, abandonaron Venezuela este jueves por la noche, luego de que fueran expulsados tras la presentación este jueves en Caracas del informe "Una década de Chávez. Intolerancia política y oportunidades perdidas para el progreso de los derechos humanos en Venezuela", en el que se afirma que los "importantes logros" de la Constitución de 1999 se convirtieron en una "oportunidad perdida".


Antes de hablar de qué es la organización Human Rights Watch, da lugar a refrescar en la memoria colectiva qué es una ONG. No debemos olvidar que una ONG es una organización privada, con unos fines y objetivos claramente definidos, y que estos son elegidos en función de los intereses de sus integrantes. Esos intereses serán altruistas o egoístas, dependiendo de la gente que la componga. Dicho esto, el hecho de que no pertenezca a un organismo gubernamental no significa que no tengan intenciones ideológicas.

Una vez aclarado esto, cabe preguntarse qué intereses tienen los dirigentes de Human Rights Watch, o los intereses de quién defienden, ya sean particulares o grupos. Dentro de esta reflexión debemos tener en cuenta quién financia a este grupo, de entre los que cabe destacar una organización jesuita norteamericana (Church World Service) o las multinacionales, también norteamericanas, Winston y Ford.

La agresión de la que se han hecho eco los medios de comunicación burgueses, motivo de la expulsión de José Miguel Vivanco, no es la primera que sufre la democracia venezolana, y no aparece ahora por casualidad. Si nos remontamos a 2004, en julio, un mes antes del referéndum presidencial, Human Rigths Watch inició una campaña contra el gobierno a cuenta de la Ley Orgánica del Tribunal Supremo, acusando a Venezuela de falta de independencia en el poder judicial.

No deja de ser sorprendente que este asunto sea de vital trascendencia, o que esta acusación, en caso de ser cierta, fuera símbolo de falta de democracia; cuando en España los partidos políticos son los que nombran al Consejo General del Poder Judicial , la cabeza de la magistratura politizada al máximo. Pero con anterioridad a esto, Human Rights Watch también formó parte del circo mediático internacional a tenor del supuesto cierre de una televisión que sigue emitiendo llamada RCTV, donde además se afirmaba que era un movimiento para hacerse Chávez con el control de los medios de comunicación, cuando en Venezuela el 80% de los medios son privados, y por tanto, también opositores. Eso por no hablar de los contenidos de dudoso respeto democrático de dicha cadena.

En 2005, salieron de nuevo a escena para defender a los cuatro enjuiciados por financiación ilegal de su organización política. Recordemos que estos individuos pagaron su campaña con dinero del Fondo Nacional para la Democracia. Este fondo, creado por el tolerante Ronald Reagan, está financiado por el Congreso de los Estados Unidos, dedicada a promover la única visión de la democracia que los poderosos norteamericanos quieren que conozcamos. Entre los miembros honoríficos de esta asociación están, por ejemplo, el senador de Arizona y hoy candidato a la presidencia de EEUU John McCain.

La segunda vez que aparecen oportunamente es en octubre de 2007, dos meses antes del Referendo Constitucional de diciembre del mismo año. En este caso la intención es clara, para ellos una constitución socialista es una ataque a sus intereses he hicieron de esto su bandera. La excusa, los poderes excepcionales que tomará el presidente en un caso de emergencia ¿acaso no existe eso en las constituciones de países europeos?

Esta última intervención tiene, evidentemente, también su intención. Y es que su objetivo no es otra cosa que las elecciones municipales que tendrán lugar en noviembre de este año. Sin duda, acercar a la oligarquía venezolana al poder, en este caso municipal, es para estos defensores de los derechos humanos mucho más necesario que, por ejemplo, investigar la masacre llevada a cabo por la oligarquía boliviana en Pando, de la cual en su página web todavía no han sido capaz de publicar si quiera una mínima condena.

Articulo original aquí

Lo que Human Rights Watch no denuncia

Luigino Bracci Roa
Yvke Mundial

La organización que lidera José Miguel Vivanco emitió un reporte de 267 páginas acusando a Venezuela de irrespetar derechos humanos. Pero no dicen nada sobre los arrestos masivos y detenciones en las convenciones de los partidos Demócrata y Republicano en EEUU, donde hubo cientos de arrestos únicamente por protestar. Este video muestra 200 arrestos de jóvenes que estaban sentados en un parque público.

El video mostrado en esta noticia, tomado del sitio web Alternet, fue realizado por algunas de las cientos de personas arrestadas en St. Paul, Estados Unidos, durante la Convención Republicana Estadounidense. Como puede apreciarse, unas 200 personas fueron arrestadas por simplemente estar sentadas en un espacio público. Ni siquiera estaban coreando consignas.

En ambas convenciones hubo agresiones contra miembros de la prensa formal y alternativa, incluyendo el arresto de Amy Goodman y otros comunicadores. No hubo pronunciamientos ni de Human Rights Watch ni de la Sociedad Interamericana de Prensa, que ayer se pronunció en defensa de Vivanco.

Nótese que las personas que editaron el vídeo incluso tuvieron temor de colocar sus nombres en los créditos, cosa que raras veces pasa en Venezuela, dado el grado de impunidad existente.

(Extraído de www.rebelion.org)