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sábado, 2 de mayo de 2009

La causa sobre Guantánamo en España apunta a Rumsfeld


Los querellantes aportan los documentos desclasificados en EEUU que solicitaba Garzón

Pere Rusiñol
Madrid
01/05/2009

La causa que ha abierto el juez Baltasar Garzón sobre las torturas cometidas por la Administración de George W. Bush ya no se limita a los abogados que construyeron el "andamiaje legal" que llevó a Guantánamo. Ahora apunta directamente a algunos de sus jefes políticos. Los más importantes: Donald Rumsfeld, ex secretaria de Defensa; y Condoleezza Rice, su consejera de Seguridad Nacional en el primer mandato de Bush y luego secretaria de Estado.

Los promotores de la querella inicial ante la Audiencia Nacional, que formalmente ha sido asumida por el juez Eloy Velasco, ya se han personado ante la nueva causa abierta por Garzón, que ha iniciado su proceso a partir de uno anterior sobre terrorismo islamista aduciendo que los informes desclasificados recientemente por Barack Obama "revelan lo que antes se intuía".

Estos mismos memorandos desclasificados que esgrime Garzón han servido a los querellantes para ampliar la querella. Inicialmente, presentaron su causa sólo contra seis juristas de Bush, algunos de lso cuales tuvieron sin embargo gran relevancia política, como Alberto Gonsales y Douglas Feith. A este punto se había agarrado el fiscal general español, Cándido Conde-Pumpido, para rechazar con argumentos durísimos la causa, tildándola de "fraudulenta" porque no iba a la supuesta raíz del problema, sino sólo contra los juristas.

Ni Bush ni Cheney

En la nueva situación, este problema ya no existe porque la querella, readaptada y ya ante la mesa de Garzón, incluye a pesos pesados del primer mandato de Bush: se pide la imputación por la planificación de la tortura un delito en el que puede aducirse jurisdicción universal de Rumsfeld y Rice, y también de John Ashcroft, ex fiscal general, entre otros. En cambio, no están en esta primera fase ni Bush ni su vicepresidente, Dick Cheney, aunque si el caso va adelante es muy difícil que no aparezcan sus nombres.

Pese a que la fiscalía quiso enterrar el caso justo después de los encuentros de José Luis Rodríguez Zapatero con el vicepresidente de EEUU, Joe Biden, primero, y el propio Obama, después, la nueva situación es mucho más explosiva: está en manos de Garzón, la querella se ha ampliado contra cargos directamente políticos y ya se han personado abogados, como acusación popular y en representación de Jamiel Abdul Latif Al Banna, británico que estuvo en Guantánamo y que Garzón investigó en la causa original que le ha servido de semilla para ésta.

Documentos nuevos

Garzón ya tiene también sobre la mesa los nuevos documentos difundidos en las últimas semanas en EEUU. Los querellantes han aportado cuatro: la investigación del Senado sobre el trato a los detenidos, el largo informe 263 páginas en que derivó, los memorandos desclasificados de la CIA sobre los métodos de interrogación, y un informe inicialmente secreto en el que el Comité Internacional de Cruz Roja describía el terrible trato que EEUU daba a los presos de la "guerra contra el terrorismo".

Del propio documento del Senado se extraen los elementos que los abogados utilizan para pedir que se impute a Rumsfeld y Rice: el documento describe el papel directo del ex jefe del Pentágono en la aprobación de nuevas técnicas equivalentes a la tortura como el waterboarding (ahogamiento simulado) y la supervisión de Rice.

(Extraído de www.publico.es)

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La revelación de 'Secretos' en la década del 70 no destruyó a la nación

viernes, 24 de abril de 2009

Condi Rice aprobó torturas


El senado de EE.UU. dice que ella fue la primera en dar el ok

24/4/2009

Un informe publicado ayer dice que la CIA recibió luz verde de Rice, entonces asesora de Seguridad Nacional, antes de que las técnicas fueran autorizadas legalmente. El informe también responsabiliza al ex vice Dick Cheney.

Una comisión del Senado de Estados Unidos afirmó ayer que la CIA pidió usar métodos violentos en interrogatorios por primera vez en mayo de 2002 y recibió luz verde de la entonces asesora de Seguridad Nacional estadounidense Condoleezza Rice, antes de que las técnicas fueran autorizadas legalmente. La revelación llegó en un informe de la Comisión de Inteligencia del Senado difundido anoche, horas después de la publicación de otro documento de la Comisión de Servicios Armados que acusó al Pentágono de aprovechar el marco legal para torturar a presuntos islamistas en Afganistán, Irak y Guantánamo.

Los dos informes del Senado llegaron en medio de gran debate en Estados Unidos sobre si juzgar a los funcionarios del gobierno de George W. Bush autores de la doctrina jurídica que justificó el empleo de las torturas, y dos días después de que el presidente Barack Obama dejara abierta esta posibilidad.

De acuerdo con una cronología elaborada por una comisión especial del Senado, cuya publicación fue autorizada por el actual secretario de Justicia, Eric Holder, Rice se reunió en julio de 2002 con el entonces jefe de la agencia de espionaje estadounidense (CIA), George Tenet. Durante la reunión, la secretaria de Estado dio luz verde para prácticas “severas” en los interrogatorios del presunto terrorista Abu Subaida, entre ellas la del “submarino”.

La cronología también prueba que cinco miembros del anterior Ejecutivo estadounidense, entre ellos Rice, fueron informados en mayo de 2002 por primera vez respecto de esos “métodos de interrogatorio alternativos”.

Un año después también el ex vicepresidente de Estados Unidos Dick Cheney, así como el antiguo secretario de Justicia John Ashcroft y varios de sus asesores recibieron informaciones respecto del “submarino”. Ellos corroboraron que “el programa de la CIA es legal y que refleja la política del anterior gobierno”, de acuerdo con las informaciones.

La propia Rice había declarado ya en 2005 que su gobierno no empleaba ni apoyaba prácticas de tortura, después de que se filtrara una definición interna de la palabra “tortura” que limitaba bastante el alcance del término. La política de Estados Unidos, señaló entonces Rice, está en concordancia con las convenciones internacionales que prohíben el trato cruel, inhumano o denigrante.

Según el diario The Washington Post, una docena de funcionarios de la administración Bush conocían detalles sobre las prácticas de tortura. De manera sorprendente –continúa el diario–, sólo Colin Powell, secretario de Estado durante el primer mandato de Bush, y el secretario de Defensa Donald Rumsfeld no fueron tomados en cuenta para decidir al respecto.


Ello, “pese a los altos riesgos para la política exterior”, dijo el senador demócrata y experto en asuntos de espionaje John Rockefeller al periódico.

El presidente Barack Obama se mostró a favor de una investigación formal en el Congreso, siempre que sea hecha por una comisión integrada por demócratas y republicanos como la que investigó los atentados del 11 de septiembre de 2001, para tratar de evitar una politización de los trabajos que frustre la pesquisa. Sin embargo, ignorando las recomendaciones de Obama, los líderes demócratas del Senado no parecen inclinados a crear una comisión investigadora con republicanos.

“De una manera u otra, es necesario que haya una explicación pública de estas políticas problemáticas”, dijo el líder del bloque senatorial demócrata, Harry Reid, quien agregó que la comisión investigadora “responderá un montón de las preguntas que tiene el pueblo estadounidense”.

En una entrevista con el canal CBS, el senador John McCain dijo que una decisión del gobierno de Obama o de la mayoría demócrata del Congreso de reabrir la controversia política se convertirá en una “caza de brujas” y tendrá un efecto “aterrador” sobre los abogados que aconsejan legalmente a los presidentes.

(Extraído de www.pagina12.com.ar)

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El Congreso de EEUU se plantea investigar la tortura

domingo, 19 de octubre de 2008

Las previsiones «inimaginables» de la Rand Corporation

22/2/2005

Los analistas norteamericanos interpretaron los hechos del 11-S como una revolución en materia de terrorismo. Durante las audiencias del subcomité del Senado estadounidense sobre las amenazas emergentes, Brian Michael Jenkins, el experto en terrorismo de la Rand Corporation, puso en tela de juicio su propia doctrina.

En un célebre artículo publicado en el año 1975, Jenkins afirmaba que el terrorismo no buscaba matar sino demostrar. Su conclusión era entonces que si existe la posibilidad de una escalada en el terrorismo esta no se expresa en términos de medios utilizados o de la importancia de los daños ocasionados sino únicamente en términos de visibilidad.

En resumen, el terrorismo sería, ante todo, una guerra-espectáculo. A la inversa, Jenkins piensa actualmente que Osama ben Laden elevó el terrorismo a la categoría de las armas no convencionales y lo incluyó en las estrategias clásicas de intensidad gradual. De los ataques contra blancos únicos, Osama ben Laden pasó a las acciones coordinadas contra blancos múltiples (al atacar las embajadas norteamericanas en Nairobi y Dar-es-Salaam, el 7 de agosto de 1998) y también venció una etapa suplementaria con cuatro desvíos de aviones simultáneos y sus destrucciones suicidas que provocaron miles de víctimas.


Para Bruce Hoffman, vicepresidente de la Rand Corporation, quien prestó declaración durante las audiencias del subcomité de la Cámara de Representantes para el Terrorismo y la Seguridad Interna, la envergadura de los sucesos del 11 de septiembre hace perder todo sentido a la noción de respuesta proporcionada. Para responder a los atentados de Nairobi y Dar-es-Salaam (252 muertos, entre ellos 12 estadounidenses, y 5 000 heridos), el ejército de Estados Unidos disparó un centenar de mísiles de crucero contra los campamentos de Osama ben Laden en Afganistán y destruyó una fábrica sospechosa de elaborar armas químicas en Sudán. Esta vez, ante un acto de guerra desmesurado, la única respuesta podía ser una guerra.

Con un presupuesto anual de 160 millones de dólares, la Rand Corporation es el más importante centro de investigaciones en materia de estrategia y organización militar a nivel mundial.

Ella es la prestigiosa expresión del lobby militaro-industrial norteamericano. Bajo la presidencia de James Thomson, cuenta entre sus administradores a Ann McLaughin Korologos (ex-presidenta del Instituto Aspen) y Franck Carlucci (presidente del Carlyle Group). Condoleezza Rice y Donald Rumsfeld fueron también sus administradores, mientras lo permitieron sus funciones oficiales.

En sus diversas intervenciones posteriores al 11 de septiembre, los expertos de la Rand Institution no dejan nunca de reclamar nuevas estructuras, nuevos presupuestos y nuevos medios de combate contra el terrorismo. Se esfuerzan también por denunciar la mortífera locura de Osama ben Laden y subrayar que es imposible para los servicios secretos prever un crimen masivo de tan grandes proporciones.

Los supuestos análisis de la Rand Corporation son en realidad la reformulación de las teorías que ella misma defiende desde hace doce años y que trata de imponer cada vez que se presenta la ocasión. Según ella, la seudo revolución del terrorismo es un concepto infundado que permite extender la «doctrina Powell» a la lucha contra el terrorismo. Cuando Bush padre dirigió la guerra del Golfo, el general Colin Powell, quien era en esa entonces el jefe del Estado Mayor Conjunto de los ejércitos estadounidenses, abandonó la doctrina de una respuesta de ataque gradual -la cual había fracasado en Vietnam- y la reemplazó por la de la destrucción instantánea. Powell había resumido su estrategia de la siguiente manera: «Vamos a darles con todo desde el principio y a hacerlos pedazos».

En una conferencia publicada en marzo 2001, por la US Air Force Academy (o sea seis meses antes de los atentados de New York), Bruce Hoffman exponía los mismos análisis que hoy sobre la supuesta «revolución del terrorismo» (solo falta en ellos el pretexto del 11 de septiembre). Más sorprendente aún, él se refirió precisamente a la «inimaginable» situación del 11 de septiembre. Dirigiéndose a un auditorio de oficiales superiores de la US Air Force, indicaba que «tratamos de preparar nuestras armas contra al-Qaeda, la organización -o quizás, el movimiento- asociado a ben Laden [...] Piensen por un momento lo que fue el atentado dinamitero contra el WTC en 1993.

...Ahora, dense cuenta que es posible derribar la torre norte sobre la torre sur y matar 60,000 personas [...] Ellos encontrarán otras armas, otras tácticas y otros medios para alcanzar sus blancos. Tienen una variedad evidente de armas, como los drones [o sea, aviones guiados por control remoto utilizados para el espionaje]».

Cuando justifica la revolución del terrorismo mediante referencias sucesivas, Bruce Hoffman se comporta como un propagandista, no como un universitario. ¿Al anticipar los acontecimientos del 11 de septiembre, Hoffman demuestra que posee las capacidades de analista visionario-medium o tales propósitos lo traicionan más bien, haciendo pensar una posible participación suya en la planificación de tales acciones?

(Extraído de www.voltairenet.org)

martes, 26 de agosto de 2008

El diario ruso Pravda pide penas de muerte para el gobierno USA por el 11-S

El pasado 22 de agosto el diario Pravda publicó en una columna de opinión un artículo en el que el norteamericano Gregory F. Fegel acusa al gobierno de los Estados Unidos de estar, entre otros, detrás de los atentados del 11-M, del 7-J, y por supuesto, del 11-S. Asimismo, dice que la destitución no sería suficiente y pide la pena de muerte para todos los altos mandos implicados.

La destitución no es suficiente
22.08.2008 - Pravda.Ru
Original en inglés

En español (extraído de trinityatierra.wordpress.com)

Hay Indicios de que todos los funcionarios del Gobierno de los USA y sus aliados planearon y llevaron acabo los ataques del 11/S

Pruebas irrefutables muestran que los más altos funcionarios de la Administración Bush en conspiración con muchos otros funcionarios del Pentágono, la CIA, el FBI, el FEMA, NSA, el NORAD, funcionarios de la ciudad de Nueva York, controladores de tráfico aéreo, ejecutivos de líneas aéreas, expertos de demolición controlada, técnicos de gráfica por ordenador, ejecutivos de los medios de comunicación y otros juntos planearon y cometieron los horribles ataques del 9/11/2001 contra el Pentágono y las Torres Gemelas del Centro World Trade en la ciudad de Nueva York. Los ataques del 9/11 se cargaron a la cuenta de unos supuestos “secuestradores árabes”, media docena de personas que, según se ha confirmado, siguen vivas y por lo tanto son inocentes de estos crímenes.

Los ataques bajo la falsa bandera del 9/11 proveyeron de una excusa para la “Guerra contra el Terrorismo” llevada a cabo por el Gobierno de los USA, cuyo propósito principal fue ganar el control para los Estados Unidos de los lucrativos campos de petróleo de Oriente Medio. Un segundo propósito fue elevar los impuestos a los ciudadanos de los Estados Unidos para aumentar gastos de defensa en apoyo del enorme complejo militar/industrial de USA y un tercer propósito fue establecer una justificación de la puesta en marca de medidas de un estado policial dentro de los Estados Unidos bajo el paraguas políticamente ambiguo de la ”Seguridad Nacional”. Cuando los derechos de libertad de expresión y reunión sean recortados a los ciudadanos de los USA, el gobierno de los Estados Unidos será capaz de establecer su agenda de dominación mundial sin la distracción doméstica de opiniones disidentes, protestas o manifestaciones.

El Pentágono, la CIA y FBI y otras agencias y funcionarios del gobierno de USA han perpetrado muchos crímenes, y las bombas falsas y ataques contra los ciudadanos de los USA y los intereses USA durante los pasados cinco años, además de los asesinatos políticos de John Fitzgerald Kennedy, Robert Fitzgerald Kennedy, y Martin Luther King, la bomba de una discoteca de Berlin en 1988, la bomba del World Trade Center en 1993, la bomba de la ciudad de Oklahoma en 1995, los ataques de cartas con ántrax de octubre en 2001.


El Gobierno de los Estados Unidos y sus aliados tambien son los responsables de las bombas del 2002 y 2005 en Bali, las bombas del tren en Madrid en el 2004, las bombas del 7/7/2005 en Londres y las recientes bombas de Ahmedabad, Jaipur, Bangalore, y de la embajada india en Kabul durante el verano de 2008.

Desde la Segunda Guerra Mundial, ideólogos fanáticos de extrema derecha con conexiones corporativas han ganado gradualmente el control absoluto de las agencias militares de USA, de la inteligencia, el gobierno y los medios de comunicación de masas de USA. El fascismo en USA no es solamente una amenaza real en manos de la administración republicana de G. W. Bush; es una situación completamente establecida desde hace décadas. El fascismo en USA es un tema resulto realmente.

El largo descenso de USA hacia el fascismo no puede ser frenado o eliminado simplemente colocando a un miembro del partido demócrata en la Presidencia o votando a una mayoría demócrata en el Congreso. La infiltración y el control del gobierno de los USA por parte de extremistas de extrema derecha está mucho más avanzada y completa. Ellos manipulan a nuestros funcionarios elegidos como a marionetas y una buena parte de nuestros funcionarios elegidos son parte del establisment fascista. La toma de extrema derecha del gobierno de los USA ha sido un golpe fascista gradual y muy exitoso que no se revertirá sin una lucha a muerte muy seria. Dada la historia de violencia indiscriminada y extrema mostrada por la elite en el poder de los USA, parece bastante obvio que restaurar la democracia de los USA requeriría inevitablemente una Revolución armada violenta en la que los americanos se opongan contra las fuerzas del gobierno de los USA y sus militares.

Como ciudadano de USA y ser humano, personalmente considero que el asesinato de personas inocentes en países extranjeros por parte de la CIA, los militares estadounidense y sus marionetas en apoyo de intereses económicos de las corporaciones multinacionales con sede en USA son totalmente inmorales e intolerables y considero mi solemne deber oponerme a la agresión de USA y al imperialismo de cualquier forma que conozca. El Gobierno de USA y la propaganda de los medios de comunicación promueven un clima en el que las acciones y actividades de las tropas de los Estados Unidos son vistos más allá de cualquier reproche, pero no hay nada de noble ni de heroico en la agresión militar sin causa previa y el genocidio contra la población extranjera inocente y vulnerable.

George W. Bush, George H. Bush, Jeb, Neil, and Marvin Bush, Dick Cheney, Donald Rumsfeld, Condaleezza Rice, Karl Rove, Wolfowitz, Perle, Powell, Armitage, Ashcroft, Abrams, Adelman, Feith, Bolton, Libby, Kissinger, Mueller, Tenet, Goss, Giuliani, Hayden, Chertoff, Baker y muchos otros cientos de indiviuos que trabajan para la Casa Blanca, la CIA, el FBI, el FEMA, el Pentágono, la NSA, el NORAD, la industria de aviación y los medios de comunicación de USA juntos planearon y ejecutaron los ataques del 9/11.

Todos ellos y sus cómplices tienen que ser juzgados por traición y asesinato en masa, y la pena de muerte sería el justo y necesario castigo por haber cometido dichos crímenes.

Necesitamos un juicio al estilo de Nuremberg por Traición y Asesinato en Masa de todos los miembros del gobierno, los militares de USA, las agencias de inteligencia de USA y sus cómplices civiles en la industria de la aviación y los medios de comunicación que participaron en los crímenes asesinos del 9/11. La pena de muerte debería ser aplicada a todos los líderes y sus cómplices, incluso si esto significa ejecutar a cientos o incluso a miles de personas, porque los crímenes de esta magnitud contra los americanos y la República de Estados Unidos no pueden saldarse sin castigo y el castigo debe ser extremo para enviar el mensaje de que los americanos no tolerarán la Traición, ni ahora ni en el futuro. Si se permite que quede sin castigo y en libertad, estos individuos representarán una enorme amenaza para la seguridad y protección de todos los americanos. Si son juzgados de los atroces crímenes del 9/11, la pena de muerte es la única forma de asegurar que ellos y sus aliados no conseguirán atacar América ni a los americanos de nuevo. Las ejecuciones deberían producirse en público y ser televisadas internacionalmente para que el mundo entero sea testigo.

Soy consciente de que existen razones de peso para oponerse a la pena de muerte en muchas situaciones. Sin embargo, también me parece bastante claro que cualquier muestra de clemencia que pudiera mostrarse a los perpetradores de los ataques del 9/11 del gobierno de los Estados Unidos dejaría abierta la posibilidad de que sus simpatizantes pudieran impedir el establecimiento de una democracia en América volcando su violencia hacia los americanos amantes de la paz. Esa es la razón por la que defiendo la pena capital sin consideración alguna de piedad ni clemencia para los asesinos del gobierno de USA que cometieron los ataques del 9/11 y a sus aliados.

Nadie dentro ni fuera del gobierno de USA debería quedar exento de un proceso penal y de la aplicación de la pena capital por los ataques traicioneros del 9/11. A los que planificaron y participaron en los ataques del 9/11 dentro del gobierno de USA y sus cómplices no se les debe permitir protegerse detrás de la cómoda excusa de la “Seguridad Nacional”. La auténtica seguridad y la supervivencia de nuestra república dependen enteramente de esto.

Autor: Gregory F. Fegel

Traducción: Trinity a Tierra

miércoles, 13 de agosto de 2008

Con la bendición de EE.UU.

El masivo ataque georgiano sobre Osetia del Sur estaba acordado con Washington

Knut Mellenthin
Junge Welt
12-08-2008

¿Tenía el presidente georgiano Michail Saakasjwili, "luz verde" de Washington, cuando en la noche del viernes dio la orden a sus fuerzas armadas de atacar Osetia del Sur? La respuesta es un rotundo sí, y sólo puede discutirse el porqué el Gobierno estadounidense decidió esta vez soltarle la correa al perro, cuando en el pasado siempre le había tenido retenido.

La reconquista de Osetia del Sur y de Abjasia es "el objetivo de mi vida", había comunicado Saakasjwili en noviembre de 2003, antes de su imposición como presidente a finales de enero del 2004 gracias a una subversión apoyada por EE.UU. "Haremos lo máximo posible para que la próxima fiesta nacional también se pueda celebrar en Sujumi, la capital de Absajia." Esto hubiera sido normalmente en enero de 2009; sin embargo, había entre medias unas nuevas elecciones. En su discurso de toma de posesión Saakasjwili habló de la necesidad de construir un ejército poderoso, "para volver a rehacer la unidad de Georgia". El 25 de mayo de 2004 se celebró en Georgia el mayor desfile militar de la historia del país y Saakasjwili dijo: "Si se pregunta a cualquier soldado georgiano porqué sirve en el ejército, todos te contestarán: para reconstruir la integridad territorial de Georgia".

¿Podía ser esto un malentendido? La cúpula georgiana pasó pronto a los hechos: tras enfrentamientos militares de varios días en Osetia del Sur, en la madrugada del 19 de agosto de 2004, tropas de elite georgianas asaltaron varias colinas estratégicamente importantes en las inmediaciones de la capital Tsjinwali. Todos los observadores competentes estuvieron de acuerdo en que era el preludio de un ataque mayor. Sin embargo, en un giro de los acontecimientos sorprendente y sin declaración oficial, los soldados georgianos desocuparon pocas horas después las posiciones conquistadas. Las suposiciones que se barajaron entonces, eran que el gobierno estadounidense había intervenido a través de su poderoso embajador en Tbilisi.

El veto estadounidense también intentaba probablemente evitar una escalada bélica en septiembre de 2006. En aquel entonces, el ministro de defensa Irakli Okruaschwili, un "loco atrevido" no muy responsable de sus actos, había tenido que aterrizar de emergencia con su helicóptero en territorio de Osetia del Sur, después de que antes hubiera estado media hora sobrevolando provocadoramente sobre Tsjinwali. "Todos deberían entender que los impulsos de esos bandidos van a terminarse de una vez por todas muy pronto", amenazó a continuación Okruaschwili e informó de que próximamente dirigiría personalmente "una expedición de castigo". En el verano del 2007 alardeaba que se bebería el próximo champán de año nuevo en la capital surosetia. En lugar de eso cayó en desgracia con Saakasjwili, fue enviado incluso temporalmente a una cárcel georgiana y vive en la actualidad exiliado en Francia.

El primer indicio de que el Gobierno georgiano tiene ahora la bendición de Washington para su agresión a Osetia del Sur, fue la actitud del congresista estadounidense Zalmay Khalilzad, antiguo representante estadounidense en Kabul, en el Consejo de Seguridad de la ONU: en la reunión especial nocturna convocada precipitadamente después del comienzo del ataque georgiano, bloqueó cada toma de posición conjunta para la renuncia a la violencia. Hasta el momento no ha llegado de Washington ni una sola palabra de crítica al proceder de Saakasjwilis.

Observadores expertos en Moscú, se habían preparado para un peor desarrollo del conflicto, después de que la Secretaria de Estado Condoleezza Rice se hubiera encontrado con Dimitri Sanakojew, el "presidente de Osetia del Sur" nombrado por el Gobierno georgiano, en su visita a principios de julio en Tbilisi. Hasta ese momento había, entre los EE.UU. y la UE, unidad para ignorar a esta figura creada para las provocaciones y las aventuras militares.

Pocos días después de la visita de la Secretaria de Estado, en la que supuestamente también se hablaría sobre la inminente agresión, comenzaron en la base de Vaziani cerca de Tbilisi, maniobras conjuntas con el nombre de "Respuesta Inmediata" dónde junto a 600 georgianos y pequeños grupos de oficiales de Ucrania, Azerbaiján y Armenia participó un contingente más fuerte de 1000 soldados estadounidenses con diferente armamento. Los ejercicios duraron del 17 al 31 de julio. Un día después de terminar, en la noche del 1 al 2 se agosto, comenzaron las provocaciones militares de las fuerzas armadas georgianas en los alrededores de Tsjinwali.

Cuando Saakasjwili dio la orden de atacar en la noche del 7 de agosto, se encontraban todavía en Georgia parte de las tropas estadounidenses que tomaron parte en las maniobras, aunque por lo visto ya no estaban en la base de Vaziani, que fue atacada por los aviones de guerra rusos.

Igualmente había en Georgia 127 instructores militares estadounidenses, entre ellos 35 empleados de empresas privadas de seguridad. El Gobierno estadounidense había empezado ya en abril de 2002 con el predecesor de Saakasjwilis, Eduard Shevardnadze, a entrenar unidades de elite del ejército georgiano y a equiparlos con las armas más modernas. Con un coste de 65 millones de dólares, este programa representaba por aquel entonces un tipo de proyecto piloto con una dimensión absoluta sin precedentes en el campo de la antigua URSS. Oficialmente terminó en el año 2004, pero continuó bajo otros nombres. Además se unieron instructores de Gran Bretaña y un número desconocido de militares y "asesores de seguridad" de Israel.



Putín acusa a Estados Unidos de transportar tropas desde Iraq a Georgia

13-08-2008
Agencias

El primer ministro ruso, Vladimir Putin, criticó el lunes duramente a Occidente, y dijo que ha confundido a los verdaderos agresores por las víctimas en su conflicto con Georgia por la región separatista de Osetia del Sur.

Putin destacó a Estados Unidos y dijo que Washington está ayudando al regreso de las tropas georgianas de Iraq.

En un discurso emotivo ante altos cargos que fue retransmitido por la televisión estatal, Putin dijo que algunos políticos de Estados Unidos todavía tienen una mentalidad de la Guerra Fría. "Es una vergüenza que algunos de nuestros socios no nos estén ayudando, sino esencialmente nos están estorbando", declaró. "Quiero decir (...) el traslado por parte de Estados Unidos de un contingente georgiano en Iraq con aviones de transporte militar prácticamente hasta la zona de conflicto".

Estados Unidos transporta tropas desde Georgia

Previamente, un cable de AFP indicó que la mitad de los 2.000 soldados georgianos desplegados en Iraq volvieron este domingo a su país para apoyar a las tropas involucradas en los combates en la región georgiana separatista pro rusa de Osetia del Sur, indicaron las autoridades georgianas.

Un responsable militar georgiano en Iraq, el coronel Bondo Maussuradze, dijo que la retirada "total" llevará "algunos días". Y añadió que los soldados georgianos habían abandonado la base de Kut (160 km al sur de Bagdad) a bordo de aviones militares estadounidenses con destino al aeropuerto internacional de Tiflis. La mayor parte del contingente georgiano se encontraba en la base del campamento Delta, en Kut.

"Los georgianos iniciaron su partida y los ayudamos con el transporte", había declarado antes un portavoz del ejército estadounidense sin precisar la modalidad de esta partida precipitada.

La primera parte del contingente georgiano que estaba en Iraq ya ha vuelto a Georgia y próximamente será trasladada a la zona del conflicto, precisó el ministro georgiano de Integración, Temur Iakobachvili. "Cerca de un millar de militares ya están en Tiflis", había declarado en Bagdad otro responsable georgiano que había pedido el anonimato.

Cinismo estadounidense

Putín añadió: "La escala de este cinismo es pasmosa - el intento de convertir el blanco en negro, el negro en blanco, y de diestramente retratar a las víctimas de la agresión como agresores y poner la responsabilidad de las consecuencias de la agresión en las víctimas".

El ex presidente ruso también dijo que Rusia va a concluir su misión de paz en Osetia del Sur. "Rusia, por supuesto, llevará su misión de mantenimiento de la paz a una conclusión lógica. Nos esforzaremos por trabajar en las relaciones con todos los participantes en este conflicto, y eso, por supuesto, incluye el lado georgiano", agregó.

(Extraído de www.rebelion.org)

lunes, 23 de junio de 2008

¡Sorpresa!: Condoleezza opuesta a albergar terroristas

Por Roberto Pérez Betancourt
Marzo 2008

Ella, quien tanto asesora a su Presidente susurrándole al oído que se abstenga de abrir la boca para no proferir sus habituales dislates, acaba de incurrir en falta grave de credibilidad al exigir lo contrario de lo que todo el mundo conoce: el gobierno al cual representa la Rice no solo da refugio a terroristas, sino que también los amamanta.

Lo informa Associated Press (AP) desde Brasilia, donde ella estuvo de visita y después de reunirse con altos funcionarios, sin ruborizarse, declaró: “las fronteras son importantes. Pero las fronteras no pueden ser un medio utilizado por terroristas para ocultarse y realizar actividades que matan a civiles inocentes’’.

Nadie le preguntó qué hacen entonces en Estados Unidos los asesinos Luis Posada Carriles y Orlando Bosch Ávila, ambos autores intelectuales confesos de la voladura de una aeronave de Cubana de Aviación en 1976, que costó la vida a 73 personas.

Tampoco le preguntaron por qué el gobierno de EE.UU. no ha extraditado a Posada, quien se fugó de una prisión en Venezuela y ese país ha formalizado y documentado las razones que, al amparo de la ley internacional y los convenios con los propios anfitriones de los delincuentes, justifican que el criminal sea juzgado en la nación bolivariana, cuya ciudadanía ostenta.

Igualmente no la inquirieron acerca de la impunidad con que en Florida se entrenan públicamente mafiosos terroristas para realizar atentados contra dirigentes cubanos.

La Rice formuló sus declaraciones después que el mandatario W. Bush arremetiera contra Venezuela y Ecuador acusándolos de “conducta perturbadora” e insinuar la posibilidad de incluirlos dentro de su arbitraria clasificación de países promotores del terrorismo, lo cual equivale a la excomulgación del Imperio.

Obviamente, la Casa Blanca está orquestando una campaña contra los presidentes Hugo Chávez, Rafael Correa y otros mandatarios progresistas de Latinoamérica, en procura de desunirlos, lo cual se evidenció durante el reciente conflicto con Colombia y Ecuador, cuyo final pacífico desagrada al mandatario de la Unión, quien hace lo indecible por encender de nuevo la candela de la desunión.

Recordemos que, entre otras altas funciones, la señorita Rice preside el Plan Bush para la desestabilización de Cuba, el cual cuenta con financiamiento multimillonario del cual se beneficia una amplia nómina de elementos mafiosos de origen cubano, entre ellos terroristas de cuello blanco, como congresistas estadounidenses de origen cubano.

Esa alta comisión dirigida por la Secretaria de Estado fue la encargada de elaborar las últimas medidas de estrangulamiento contra las familias cubanas, las cuales acentuaron el carácter genocida del bloqueo económico, comercial y financiero impuesto y mantenido por gobiernos norteamericanos contra Cuba desde hace casi medio siglo.

Esto que sigue no lo dijo ningún político de izquierda, ni corresponde a declaraciones de Venezuela o de Cuba, sino, aunque parezca risible, es una muestra fehaciente del grado de cinismo al que puede llegar una alta funcionaria del gobierno de Bush. Así dijo la señorita Condoleezza Rice, sin que apenas le temblara la voz:

’’Hay una obligación en la ONU, que todos los estados han adoptado, para hacer todo lo posible para evitar que los terroristas usen activamente su territorio y financiar el terrorismo. Esperamos que todos los estados responsables cumplan con sus obligaciones’’.

El cable no precisa si algún reportero le preguntó: ¿Cuándo empieza el gobierno de Estados Unidos a cumplir sus obligaciones?

(Extraído de voltairenet.org)

Exigirán al FBI considerar terrorista a Posada Carriles

15/01/2008
prensa-latina.org

La organización femenina antibelicista CODEPINK exigirá hoy al Buró Federal de Investigaciones (FBI) que incluya a Luis Posada Carriles en su listado de los terroristas más buscados.

Representantes de la agrupación harán efectivo su reclamo frente al edificio del FBI en Miami, ciudad donde goza de libertad el criminal.

Los manifestantes también protestarán este lunes ante las oficinas de la representante Ileana Ros-Lehtinen, una de las congresistas que más ha incentivado las acciones hostiles de Estados Unidos contra la isla.

El pedido al FBI es parte de la campaña El más buscado, puesta en práctica por CODEPINK desde el sábado último para exigir también la extradición de Posada Carriles a Venezuela, cuya justicia lo reclama por la voladura en pleno vuelo de una nave de Cubana de Aviación en 1976, con 73 personas a bordo.

"Es inexplicable que el gobierno ande a la caza de terroristas que están escondidos a miles de millas de Estados Unidos, cuando tiene a uno de los más connotados viviendo libremente en Miami", afirmó Medea Benjamin, co-directora de la organización.

CODEPINK considera que a la campaña publicitaria puesta en vigor por el FBI en 20 grandes ciudades de Estados Unidos para identificar a criminales y terroristas, carece del nombre de Posada Carriles.

Miembros de la agrupación femenina intentaron el sábado recoger firmas en la popular Calle Ocho de esa ciudad para avalar su petición al FBI, pero fueron hostigados por bandas de la ultraderecha cubana.

"La policía no ha sido capaz de cumplir su misión y de garantizar nuestra seguridad. Nos quedamos sumamente desconcertados y molestos con la situación", acotó Benjamin.

CODEPINK está integrada por unas 150 mil personas, organizadas en más de 250 grupos en ciudades de Estados Unidos y otros países.

Posada Carriles fue liberado el 19 de abril de 2007, luego de que la jueza Katherine Cardone dictaminó su excarcelación, amparada por una fianza corporativa de 250 mil dólares.

La orden resultó contradictoria, ya que en su alegato Cardone reconoció que el delincuente de origen cubano participó en "algunos de los más infames acontecimientos del siglo XX en la vida política de Centroamérica".

Entre estos, mencionó la invasión a Cuba por Playa Girón, el caso Irán-Contras, la bomba contra el vuelo 455 de Cubana de Aviación, los atentados a instalaciones turísticas habaneras en 1997 e incluso, según algunas teorías de conspiración, el asesinato del presidente John F. Kennedy.

Codepink, Women for Peace

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Rice asegura que EE.UU. pondrá fin a las acciones «malignas» de Irán en Irak

25-10-2007
AP

Una activista contraria a la guerra de Irak se encaraba ayer con las manos manchadas de rojo a Condoleezza Rice en el Congreso

WASHINGTON. La secretaria de Estado de la Administración Bush, Condoleezza Rice, anunció ayer que Estados Unidos pondrá fin a las actividades «malignas» de Irán en Irak y a su papel desestabilizador en la región. Rice, que compareció ante la Comisión de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes para debatir sobre Oriente Medio, afirmó que Teherán pone en peligro la seguridad y la prosperidad de sus vecinos al dar su apoyo a fuerzas extremistas en la zona, según informó Reuters. «Irán está apoyando a determinados grupos chiítas en Irak que matan a civiles inocentes, a miembros de las fuerzas de seguridad iraquíes y a militares de la coalición», declaró Rice ante los congresistas.

Interrogada sobre sus planes de convocatoria de una cumbre sobre el proceso de paz en Oriente Próximo en Annapolis (Maryland), la responsable de la diplomacia estadounidense defendió su proyecto de reunión internacional, prevista para finales de noviembre, aunque reconoció implícitamente sus dificultades a la hora de convencer a varios países árabes para que participen.

Incidentes

Rice explicó que su objetivo es reforzar a los árabes moderados frente al ascenso de grupos extremistas como Hamas, opuestos a cualquier compromiso con Israel. «El calendario lo marca la necesidad de dar un impulso a las fuerzas de la moderación y de deshacer las fuerzas del extremismo», testificó ante los parlamentarios.

La audiencia de la secretaria de Estado fue objeto de varias interrupciones por parte de manifestantes que corearon consignas contra la guerra de Irak, según la agencia Efe.

Desiree Anita Ali-Fairooz, activista del grupo «CodePink», se enfrentó a Rice con las manos manchadas del color de la sangre cuando ésta hacía su entrada en la sala. «¡Criminal de guerra!», espetó a la alta funcionaria antes de ser desalojada por los servicios de seguridad de la cámara. Otra militante pacifista, Liz Hourican, desplegó un cartel que leía «sangre en sus manos».